La crisis se intensifica en los ranchos de Chihuahua, donde pequeños ganaderos como Abel Parada y Marcelo enfrentan una realidad angustiante: corrales llenos de ganado que no pueden vender ni exportar debido al cierre de la frontera con Estados Unidos, medida implementada para contener un brote de gusano barrenador que se filtró desde Centroamérica.
“Ya no hay precio, los compradores tienen llenos sus corrales”, lamenta Abel Parada, mientras observa a sus animales. Para él y otros pequeños productores, como su compañero Marcelo, cada cabeza de ganado representa el sustento diario de sus familias. Sin la posibilidad de exportar, sus ingresos se desploman. “¿Qué hacemos con ellos si no abren la frontera?”, cuestiona Marcelo, evidenciando la desesperación que se extiende por el norte del país.
El gobierno es timorato ante la #HerenciaMaldita del expresidente López Obrador, quien nunca se puso a pensar que dejar que el #ganado entrara a México a tontas y locas tendría consecuencias.
— Fuerza Informativa Azteca (@AztecaNoticias) May 16, 2025
En #Chiapas, los productores aseguran que detrás de ese mercado ilegal está el… pic.twitter.com/bLWTsbyg3x
Una crisis anunciada
El problema no surgió de la noche a la mañana. Desde noviembre de 2024, criadores y exportadores advirtieron sobre la presencia del parásito en el sur de México. Marco Cuesta, exportador de ganado, fue directo al señalar responsabilidades: “Ya se veía venir. La mosca ya existía. ¿Quién no hizo su chamba? El gobierno mexicano”.
El recorte presupuestal del 31% al Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (SENASICA) complicó aún más la situación. Con las estaciones cuarentenarias en Chiapas prácticamente desmanteladas, los tráileres con ganado infectado cruzaron sin control hacia el norte del país, agravando la crisis.
Pérdidas millonarias
La industria ganadera mexicana, que exportó 1.2 millones de cabezas en 2024, ahora enfrenta pérdidas diarias estimadas en 230 millones de pesos, según cálculos de productores como Luis Valles y Marco Cuesta. Sin acceso al mercado estadounidense, muchos se ven obligados a vender sus animales a precios de remate en el mercado nacional, apenas recuperando una mínima parte de su inversión.
“Estamos pagando los platos rotos, y la mosca ni siquiera está en el norte”, enfatiza Valles, reflejando el sentimiento de frustración que se extiende entre los ganaderos.
Mientras tanto, el ganado sigue engordando, los corrales se saturan y las familias rurales se preguntan cuánto tiempo más podrán resistir sin una solución definitiva a esta crisis.
📲 ¡Síguenos en nuestro canal de difusión de WhatsApp! —> Solo da clic aquí
Y para esta y más información, síguenos también en nuestras múltiples redes sociales: en Facebook nos encuentras como Azteca Chihuahua , vía Twitter @aztecachihuahua . Instagram como @tvaztecachihuahua y TikTok @tvaztecachihuahua o también visita más notas en nuestro sitio web www.aztecachihuahua.com
Quizás te interese: Joven asesinado y abandonado en El Rejón estaba próximo a graduarse; hay un detenido