Vacaciones de Andy López Beltrán reavivan críticas por estilo de vida de dirigentes de Morena
El hijo del expresidente Andrés Manuel López Obrador fue captado en Tokio, Japón, en un viaje que desató polémica sobre su congruencia con los principios de austeridad del partido Morena.
Andrés López Beltrán, conocido como “Andy”, secretario de organización de Morena e hijo del expresidente López Obrador, se convirtió nuevamente en tendencia tras ser captado vacacionando en Tokio, Japón. Como es habitual en estos tiempos, el propio Andy intentó dar su versión de los hechos en redes sociales, desmintiendo los montos filtrados sobre los gastos de su viaje. Sin embargo, sus explicaciones no lograron contener las críticas ni evitar el llamado de atención desde Palacio Nacional.
Claudia Sheinbaum responde con un mensaje de humildad
Durante una conferencia matutina, la presidenta Claudia Sheinbaum fue cuestionada sobre el caso y respondió sin mencionar directamente a López Beltrán, pero enviando un mensaje claro sobre la importancia de la modestia en el ejercicio del poder: “El poder, cualquiera que se tenga, se debe ejercer con humildad, con sencillez, porque nosotros nos debemos al pueblo”, sentenció la mandataria.
¿Un viaje de “justa medianía”?
A través de una carta pública, Andy López Beltrán aseguró que el viaje fue producto de “extenuantes jornadas de trabajo” y negó haberse trasladado en vuelos privados o del Ejército. Detalló que voló de la Ciudad de México a Seattle y de ahí a Tokio en clase turista. También desmintió haberse alojado en un hotel de 50 mil pesos por noche, afirmando que el costo fue de 7,500 pesos diarios con desayuno incluido.
Asimismo, afirmó estar en sintonía con el principio de “vivir en la justa medianía” que promovía su padre. No obstante, los datos comparativos cuestionan esa afirmación.
Los números no cuadran con la realidad nacional
Un cálculo básico del viaje evidencia que tan solo el vuelo redondo —México–Seattle–Tokio y regreso— tiene un costo estimado de casi 30 mil pesos. A esto se suman los gastos de hospedaje, alimentación, transporte local y entretenimiento. Con base en el salario mínimo mensual actual en México (aproximadamente 8,360 pesos), una familia tendría que laborar durante un mes completo para cubrir apenas una noche de alojamiento en el hotel elegido por el hijo del expresidente.
Indignación ciudadana y reacciones internas
Entre la ciudadanía no tardaron en surgir las críticas. Para muchos, este tipo de viajes representan un alejamiento de los valores que Morena pregona. “Ese dinero podría gastarse en cosas que necesita el país, no en viajes tan costosos”, comentó un ciudadano entrevistado.
Incluso dentro del oficialismo hubo quien cuestionó la autenticidad y el tono de la carta justificativa de López Beltrán. Algunos dudan que haya sido escrita por él, y otros, como el legislador Agustín Rodríguez, la calificaron directamente como “malísima”, independientemente de su autoría.
Una imagen contradictoria
El caso de Andy López Beltrán revive una discusión constante en torno al estilo de vida de los dirigentes morenistas. Mientras el partido promueve una política de austeridad y cercanía con el pueblo, algunos de sus miembros —o sus familiares— parecen alejarse de estos principios con acciones que alimentan la percepción de hipocresía y doble discurso.
Por ahora, el dirigente morenista guarda silencio ante las nuevas críticas. Sin embargo, el escrutinio ciudadano parece no dar tregua, especialmente cuando se trata de quienes, por historia familiar y cargo político, están llamados a ser ejemplo de congruencia.
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