Las tortillas, un alimento fundamental en la cocina mexicana, son protagonistas de una amplia gama de platillos. Pero, ¿alguna vez te has preguntado cómo es su producción en máquina? Vamos a descubrirlo.
El proceso de fabricación comienza con la preparación de la masa, que se realiza mediante una máquina que mezcla harina y agua hasta lograr una consistencia suave y maleable. Esta mezcla se transfiere a una segunda máquina que la moldea en círculos perfectos. Posteriormente, las tortillas son colocadas en una banda transportadora, donde se someten a calor controlado, garantizando que queden suaves y flexibles.
Una vez cocidas, las tortillas están listas para su consumo o su empaque. Este alimento es sumamente versátil, ya que puede usarse en la preparación de tacos, burritos, quesadillas y enchiladas. Si se deja endurecer, se convierte en tostadas, o si se corta en triángulos, en totopos, ideales para acompañar guacamole o sopas.
La tortilla sigue siendo un pilar de la gastronomía mexicana, adaptándose a la perfección a una gran variedad de platillos.