La madrugada del 8 de julio de 2025, la tranquilidad en una cabaña familiar a orillas del río Guadalupe, en Texas Hill Country, se convirtió en una lucha por la supervivencia. Jane Towler, de 70 años, despertó cuando el agua comenzaba a filtrarse. Poco después recibió una llamada de emergencia de un amigo: “¡El agua está en mi casa! ¡Sal de ahí!”.
Lo que siguió fue una crecida histórica que en menos de una hora elevó el nivel del río casi ocho metros, arrastrando casas, autos y cobrando la vida de más de 100 personas, incluidos varios niños.
El río arrasó sin advertencia
Jane, su hijo Alden Towler, su amiga Shabd Simon-Alexander y la hija de esta última estaban dentro de la vivienda cuando comenzó la inundación. Los videos y fotos capturados durante la emergencia muestran cómo el agua cubría rápidamente la cocina, el patio y los muebles.
Intentaron buscar rutas de escape, pero todo a su alrededor estaba inundado. Con el agua subiendo al nivel del pecho, optaron por abrir una trampilla y refugiarse en el ático. La oscuridad y el olor a drenaje invadieron el ambiente, mientras la lluvia no cesaba.
Sobrevivir en el techo, sin luz ni ayuda
Desde el techo, iluminados solo por relámpagos, escucharon gritos de vecinos, vieron casas flotar y vehículos ser arrastrados. A través de una rejilla rota, lograron salir al tejado. Solo contaban con una linterna, una botella de agua y un poco de cacahuates.
Jane logró contactar al 911 desde la encimera de la cocina antes de perder la señal. El operador solo pudo aconsejarles que subieran lo más alto posible y esperaran. Durante horas, la familia permaneció en la intemperie, mientras su cabaña era golpeada por los restos de otras viviendas arrastradas por la corriente.
La tragedia apenas comenzaba
Al amanecer, lograron pedir ayuda y fueron trasladados a una iglesia donde se congregaban otros sobrevivientes. Fue entonces cuando comenzó lo que llamaron “el verdadero horror": ayudar a los heridos, presenciar el llanto de niños separados de sus familias y conocer testimonios desgarradores de otros afectados.
Un niño llegó con una herida grave en la pierna. Su hermana de tres años seguía desaparecida, al igual que sus abuelos. Su tía fue encontrada horas después, gravemente herida.
Más de 100 muertos y más de 160 desaparecidos
Las autoridades confirmaron más de un centenar de muertos tras la crecida del río Guadalupe. El impacto fue devastador en zonas rurales de Texas, con comunidades enteras afectadas. El gobierno federal ha desplegado operativos de búsqueda y rescate, aunque las críticas no se han hecho esperar, especialmente por los recortes presupuestarios previos a organismos como NOAA y FEMA.
Videos y fotos que dieron la vuelta al mundo
Las imágenes captadas por la familia Towler se viralizaron en redes sociales y medios internacionales, mostrando el drama vivido desde dentro de una de las casas arrasadas. No solo retrataron el miedo, sino también los gestos de solidaridad que surgieron en medio del caos.
Un desconocido regaló 300 dólares a Alden tras saber que había perdido su cartera. “Todavía se me quiebra la voz por la fuerza imparable de ayudar a los demás”, declaró días después.
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