El avance de una variante más eficiente del norovirus ha provocado un incremento notable de contagios en distintas regiones del mundo. Investigaciones recientes confirman que un linaje renovado del genotipo GII.17 está impulsando brotes de gastroenteritis y una circulación más agresiva del virus, coincidiendo con una oleada invernal que ha duplicado los casos en Estados Unidos.
Aumento de casos en Estados Unidos: síntomas y riesgos
Datos del Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) revelan que, al 15 de noviembre de 2025, el porcentaje de pruebas positivas alcanzó 14%, el doble que hace tres meses. El norovirus —frecuentemente llamado “enfermedad del vómito invernal”— provoca síntomas intensos como vómitos persistentes, diarrea, náuseas y deshidratación severa.
El cuadro suele manifestarse entre 12 y 48 horas después del contagio y dura de uno a tres días, afectando con mayor fuerza a niños, adultos mayores y personas inmunocomprometidas, especialmente en espacios cerrados como escuelas, hospitales y cruceros.
El origen del brote: una variante mejor adaptada a humanos
Un estudio publicado en Nature Communications indica que el resurgimiento del genotipo GII.17 —responsable de infecciones entre 2023 y 2025— se debe a una nueva variante con mutaciones que mejoran su capacidad para infectar al ser humano.
La investigación analizó más de 1.400 genomas del virus, con participación del Centro Nacional de Microbiología del ISCIII, que aportó secuencias obtenidas en brotes recientes en España. Los resultados muestran que esta variante se vincula a la antigua línea C, aunque desarrolló cambios propios que le otorgan una mayor eficiencia de transmisión.
Qué mutaciones explican su rápido avance
Los científicos identificaron modificaciones relevantes en la proteína VP1, elemento clave en la estructura externa del virus. Estos cambios permiten una mejor adhesión a los azúcares que actúan como receptores en las células humanas, facilitando el inicio de la infección.
Durante 2023, la variante mostró una diversidad genética amplia, la cual se redujo en 2024, una señal de que el virus estaba afinando su adaptación para infectar a mayor número de personas. Incluso se observó que algunas mutaciones aparecieron dentro de pacientes individuales antes de propagarse a gran escala.
Un virus capaz de evadir mejor al sistema inmunitario
El estudio también señala que las modificaciones en VP1 alteran las propiedades antigénicas del virus. Esto le permite sortear con más facilidad la respuesta inmunitaria, generando una población más amplia de personas susceptibles. Esta ventaja evolutiva ha favorecido su expansión rápida en Europa, América y otros territorios.
Importancia de la vigilancia genómica y las vacunas en desarrollo
Especialistas del ISCIII subrayan que el comportamiento del GII.17 demuestra la necesidad de mantener activa la vigilancia genómica internacional. La identificación oportuna de variantes emergentes es crucial para anticipar cambios en los patrones de contagio y ajustar estrategias de salud pública.
Además, los hallazgos refuerzan el potencial de la proteína VP1 como un objetivo prometedor para las vacunas contra el norovirus, dado que pequeñas variaciones en su estructura modifican la forma en que el virus se une a las células y evade la inmunidad.
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